La Secretaría de Hacienda y Crédito Público redujo a la baja su estimación de crecimiento económico del 4.1 a 3.4% en 2022 y 3.5% el próximo año.
La actualización de la estimación de crecimiento económico, indicó la Secretaría de Hacienda, “se da en un contexto donde la economía global enfrenta importantes retos, entre los cuales destaca la prolongación de desbalances entre oferta y demanda derivados de la pandemia de Covid-19”.
Dichos desbalances, “provocaron cuellos de botella y problemas logísticos en las cadenas globales de valor, escasez de insumos industriales, aumentos en los costos de transporte y un alza en los precios de alimentos y materias primas, principalmente los energéticos”, indicó la dependencia.
El año pasado, el PIB repuntó un 5%, después de sufrir en 2020 su peor desempeño desde 1932 durante la Gran Depresión, debido a los estragos en la actividad productiva generados por la pandemia de coronavirus
En el documento la Secretaría de Hacienda estimó que la inflación cierre el 2022 en un 5.5% y para el próximo año calcula que este indicador cierre en 3.3%, según el documento dado a conocer el primero de abril.
“El conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania ha exacerbado las presiones al alza en los precios de alimentos y materias primas, al tiempo que podría generar desabastos de insumos industriales (…) representa una fuente de volatilidad en el mercado financiero, observándose recomposiciones de portafolios hacia instrumentos financieros de bajo riesgo, denominados en monedas de reserva y emitidos por economías avanzadas”, señala la Secretaría de Hacienda.
“Para la segunda mitad del sexenio, esta administración continuará con una política fiscal consistente que busca: mantener finanzas públicas sanas; mantener la deuda en una trayectoria decreciente e incrementar la recaudación a través del combate a la evasión y elusión fiscal”.
La Secretaría de Hacienda añadió que la moneda mexicana cerraría 2022 en 20.7 pesos por dólar, arriba de la cotización actual, en niveles de 19.8350 unidades, en tanto que la inflación culminaría en un 5.5%, por debajo del 7.29% que alcanzó hasta la primera quincena de marzo.
Fuente: Forbes
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