Katia Lemus Barajas
Fidencio López Plaza, obispo de la Diócesis de Querétaro, llamó a los feligreses a ayudar, escuchar, mirar y a servir desde el rostro de Jesús rostro a quienes siguen crucificados, a los más débiles e indefensos.
“Así hermanas y hermanos con la muerte y resurrección de nuestro señor Jesucristo podemos ubicar mejor la pasión de nuestro pueblo sufriente, espantado y agobiado por las crisis y las pandemias de ayer, de hoy y de siempre”.
Durante la celebración eucarística del Domingo de Ramos, López Plaza refirió que el mensaje eucarístico tiene como finalidad ayudar a descubrir la lección y aprender a resucitar antes de morir.
“El Domingo de Ramos lo comenzamos con una invitación a aprender a celebrar el triunfo antes de morir y ahora, según el evangelio, nos propone aprender a celebrar el triunfo antes de morir dando sentido a la pasión del pueblo; al comenzar la Semana Santa de este año 2022, Jesucristo nos recuerda la primera lección de esta semana de luz y de esperanza. Todo esto como hemos escuchado hoy, ocurre desde el púlpito de un pobre burro para enseñarnos a reconocer e interpretar los signos proféticos por los que Dios habla ordinariamente a su pueblo”.
Recordó que el próximo viernes, Viernes Santo, se hará desde el púlpito de la cruz para enseñarnos el lenguaje del amor hasta el extremo y el próximo domingo se será desde el púlpito de la creación, desde el saludo de la paz y mostrando las llagas de las manos y el costado para enseñarnos el camino de la paz.
“Jesús llamaba a todos a mostrar la justicia de Dios. No le importaba romper la religión o tradiciones religiosas; sólo tenía una pasión: estar al pendiente de sus hijos, sólo le preocupaba aliviar el sufrimiento de los hermanos, sólo le preocupaba el bien de todos sus hijos, de los hijos de Dios y esto no se lo perdonaba. Se identificaba demasiado con las víctimas inocentes”.
Be the first to comment