La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) solicitó a las autoridades federales medidas cautelares para proteger a la caravana de más de 11 mil migrantes, que parten de Tapachula a la Ciudad de México, para luego trasladarse a Piedras Negras, Coahuila.
La CNDH pidió que se hagan las acciones necesarias para garantizar la atención humanitaria para los migrantes, tal como darles agua, suero hidratante, alimentación, personal médico especializado y de primeros auxilios, medicamentos, ambulancias, especialistas que den atención psicológica; así como insumos de higiene personal.
Además, pidió salvaguardar sobre todo los derechos humanos de las niñas, niños, adolescentes, mujeres embarazadas, personas mayores, con problemas de salud y con discapacidad que la integrarán ya que los miembros de la caravana migrante tienen miedo a sufrir actos violentos por parte de la Guardia Nacional, el Instituto Nacional de Migración (INM) y de la policía estatal.
De igual forma, el activista y organizador de esta caravana, Luis Rey García Villagrán, acusó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador de convertir a Tapachula en una gran cárcel migratoria, al tratar de contener a miles de migrantes que buscan llegar a la frontera norte del país, otorgando citas que tardan entre dos y seis meses a través de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y el INM.
Finalmente, solicitaron al INM armar mesas de trabajo para los procedimientos de regularización migratoria y establecer los recursos técnicos y humanos con tarjetas que garanticen el tránsito por territorio nacional.
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