La Fundación Protectora de Animales en la zona del Évora pidió apoyo al ayuntamiento de Guamúchil, Sinaloa, para poder demandar a los culpables del envenenamiento masivo de perros que provocó la muerte de al menos 14 canes en un refugio estatal.
El lugar donde sucedió la masacre está ubicado en la colonia 10 de mayo y está a cargo de Tania Miranda, quien registró la muerte de los 14 perritos rescatados luego de que ingirieron comida intoxicada a propósito. La rescatista describe que los animales comieron el alimento cuando ella estaba afuera del lugar y cuando regresó al refugio encontró a varios de sus canes sangrando y arrojando espuma por la boca.
Los dueños y voluntarios del lugar, junto con la Fundación Protectora de Animales, recopilan evidencias para denunciar la crueldad animal ante las autoridades, quienes señalan que los refugios en el estado albergan a decenas de animales y aceptan comida de donadores sin esperar que haya una mala intención hacia éstos seres vivos.
Miranda indicó que sospecha que son dos hombres los causantes de la tragedia cuya identidad conoce pero que aún no puede revelar aún para no entorpecer la investigación. De cualquier forma, quien resulte culpable de la muerte de los canes podría enfrentar un severo castigo, ya que usó un producto químico que es denominado como 1080.
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