Decenas de médicos de servicio social, internos y residentes marcharon del Monumento a la Revolución hasta el Zócalo de la Ciudad de México, para exigir mejores condiciones laborales y de seguridad en el desempeño de su profesión.
Esta manifestación se da luego del asesinato del médico pasante Eric Andrade, ocurrido el viernes 15 de julio al interior del Hospital Integral de la comunidad El Salto, en el municipio de Pueblo Nuevo, Durango. El médico se encontraba dando atención médica cuando una persona sacó un arma y disparó en varias ocasiones en su contra.
Cynthia Flores, presidenta de la Asociación Mexicana de Médicos en Formación, asegura que quienes practican la medicina son blancos constantes de la delincuencia y que incluso “hay quienes, por el crimen organizado, han tenido que ser reubicados y tienen que volver a comenzar su servicio social y, lamentablemente, eso no resuelve nada”.
Los manifestantes avanzaron en silencio rumbo al Zócalo de la ciudad portando cartulinas y pancartas con sus demandas, mientras realizan el pase de lista de sus compañeros que han perdido la vida en el contexto de la violencia que atraviesa el país.
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