#LaColumnaDelFrenteQueretano «La Viruela Del Mono»

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Por Waltter López.
Vocero del Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación y el Estado Laico

Para Alaín Pinzón, director de @VIHveLibre por su empatía y activismo.

Alguien me habló todos los días al oído, despacio, lentamente. Me dijo ¡Vive, vive, vive!. Era la muerte. Así el gran poeta Jaime Sabines nos recuerda que la muerte es sólo una etapa más del ciclo de la vida.

La columna de hoy trata de la viruela del mono, declarada como emergencia de salud internacional por la OMS, a partir del 23 de julio de 2022. Al igual que muchas otras emergencias de salud que hemos vivido en el pasado, los primeros
brotes de la enfermedad se dan en un grupo poblacional en especial, que por alguna razón se encuentra más expuesto al agente infeccioso, pero de allí se distribuye al resto de la población si no hay una estrategia de contención, que puede ser el aislamiento para romper las cadenas de contagio, o usar tecnología médica como las vacunas o medicamentos preventivos para reducir la velocidad de contagio hasta eliminar la emergencia de salud.

FOTO: Cortesía Universal Querétaro

Por ejemplo, es bien conocido que malaria y la fiebre amarilla eran enfermedades endémicas en el istmo de Panamá, y cuando se estaba construyendo el canal por los franceses y se decía que era una enfermedad “de los hombres” y se sabe que más de 25,000 personas murieron durante la construcción del canal y fue una de las razones para que Francia dejara botado ese gran proyecto. Fueron los estadounidenses los que descubrieron que la enfermedad se transmitía por el mosquito Aedes aegypti y fue hasta que desarrollaron protocolos de salud muy estrictos que incluían fumigaciones y vigilancias y controles epidemiológicos que pudieron detener la expansión de la enfermedad hasta erradicarla.

Otro caso fue el virus del VIH que se propagó rápidamente entre hombres que tienen sexo con otros hombres (HSH) en la década de los 80´s y se llegó a llamar “el cáncer gay”, y por ese perjuicio, la respuesta de los gobiernos fue lenta en un inicio, hasta que se dieron cuenta que estaban perdiendo a muchas personas valiosas en edad productiva y que no iba a parar la presión de organizaciones civiles y de las mismas personas enfermas, que tuvieron que salir a las calles de todo el mundo a manifestarse para visibilizar lo evidente: que no había una respuesta institucional acorde al tamaño de la tragedia, en gran medida por los prejuicios homofóbicos.

Algo similar pasó con la epidemia mundial del Covid-19, donde al inicio de la pandemia se llegó a decir que era “una enfermedad de ricos” ya que los primeros casos provenían de personas que habían viajado al extranjero.

Si algo ha aprendido el mundo con los casos cada día más frecuentes de epidemias debidas a nuevos virus y bacterias, es que es mejor estar preparados ante cualquier riesgo biológico y que los planes epidemiológicos NO se deben crear en medio de las crisis, sino que deben forman parte de la cultura organizacional de las instituciones de salud pública.

Es por eso que la respuesta institucional Mexicana a los casos de viruela del mono, de simplemente aislar y dejar en observación a los hombres contagiados, suena más a un castigo medieval que a una real solución de salud pública, sobre todo por la negativa del Dr. Hugo López Gatell, subsecretario de prevención y promoción de la salud, a escuchar y reunirse con los ya miles de pacientes que están sufriendo no sólo las molestias de dicha enfermedad, sino el aislamiento por 21 días, con el consiguiente trastorno no sólo de su salud, sino también de su economía y salud
mental, ya que varias de esas personas no cuentan con seguridad social.

Es por ello que varios activistas han vuelto a las calles, como en los años 80´s y 90’s del siglo pasado, para exigir un trato digno y humanitario de las autoridades federales de salud y demandar la aplicación de la vacuna, que ya existe y que el gobierno federal mexicano no quiere comprar, como ya lo han hecho sus dos pares norteamericanos y latinoamericanos como Perú y Chile.

Esperamos que la muerte le susurre al oído del Dr. Gatell: compra las vacunas “para que ya no sufran, para que vivan”.

Twitter: @waltter_lopez
Twitter: @FrenteQueretano
FB: Frente Queretano DNDEL

Newsweek

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