Tras días de intensas conversaciones entre Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, y los principales implicados en la elaboración del tratado, el gobierno ruso ha confirmado que volverá a integrarse al pacto con el que se permite que continúe la exportación de grano desde Ucrania.
Según explicó el Ministerio de Defensa de Rusia, esta reintegración al tratado se consiguió ya que se obtuvieron las garantías necesarias por parte de Ucrania para asegurar que no se usará el «corredor humanitario establecido por el acuerdo, y los puertos ucranianos designados para la exportación de bienes agrarios, para lanzar operaciones militares contra la Federación Rusa», se dijo en un comunicado.
El mensaje también detalló que Turquía y una organización internacional no mencionada, ayudaron a arrancar tales compromisos del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
De acuerdo con el tratado, funcionarios rusos y ucranianos deben estar presentes en un centro de inspección basado en Estambul donde se inspeccionarán los buques que salen y entran en el Mar Negro para garantizar la seguridad de los barcos, además de asegurar que estos no transportan armas a Ucrania.
Durante estas conversaciones, y aprovechando su cercanía tanto a rusos como a ucranianos, el Gobierno de Turquía ha conseguido incluso reunir a los ministros de Exteriores de ambos países con los que finalmente se reactivó la exportación de grano.
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