Rosario Robles, la exsecretaria de Desarrollo en el Gobierno de Enrique Peña Nieto, por medio de una entrevista publicada este lunes descartó inculpar al expresidente a cambio de beneficios procesales.
“Hubo una propuesta, yo no sé si directamente venía del abogado que en ese momento estaba siguiendo alguno de los casos, que me pedían concretamente que incriminara a personalidades del gobierno anterior y yo por supuesto no estoy dispuesta a incriminar a nadie en situaciones que son absolutamente falsas” conto robles al periódico El Universal en una llamada telefónica.
Las personalidades a que se refiere son el expresidente Peña Nieto y del exsecretario de Hacienda y Exteriores Luis Videgaray, quienes insistió que «en absoluto» están vinculados a su caso.
«Han pasado años, y lo que hay es una investigación periodística, no una investigación judicial que acredite que hubo contratos simulados, con triangulación de recursos hacia las universidades», insistió.
Robles recordó que consiguió un amparo de un tribunal colegiado contra su prisión preventiva, pero el juez lo desestimó el pasado miércoles, argumentando un elevado riesgo de fuga.
La exsecretaria menciono como la invadió la impotencia ante tal hecho y como ha sido su permanencia dentro Santa Martha Acatitla “Pues han sido dos años, sobre todo, de un profundo dolor, de no estar en mi casa, con mi familia, con mi hija. El dolor que me produce el que muchas veces, a pesar de la fortaleza que ella ha mostrado, veo cómo sufre y se angustia. Ella incluso tuvo que vender su departamento para ayudarme a sufragar parte de estos gastos, porque, aunque no lo creas, vivir aquí es bastante caro”.
Su caso contrasta con el del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, quien fue extraditado a México y afronta en libertad sus dos causas de corrupción gracias a un acuerdo con la Fiscalía por el cual incriminó a Peña Nieto y a medio centenar de políticos.
Robles, quien se considera una perseguida del actual Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
«El presidente sabe que yo soy inocente, sabe que no tengo un peso mal habido. Hay poca gente que me conoce bien en la política, una de ellas se llama Andrés Manuel López Obrador», expresó la política, quien lamentó que el actual presidente «promueve el odio en lugar de promover la reconciliación».
Fuente: El Universal
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