Katia Lemus Barajas
Cnidia de la Cruz Reséndiz, directora General de la Conferencia Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Querétaro refirió que de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Dinámica Sobre Relaciones en los Hogares y en las Oficinas (ENDIREH) 2021, el 32.3 por ciento de las mujeres ha sufrido violencia laboral.
“De este 32.3 por ciento, el 27.1 de las mujeres han sufrido violencia física o sexual y el 35 por cineto ha sido agredida en sus oficinas de trabajo por algún compañero; el 82.3 por ciento de las mujeres que laboran en las oficinas en Querétaro ha tenido algún tipo de violencia directamente en las oficinas donde se presentan a trabajar cada día y al menos tres de cada 10 mujeres han sufrido violencia laboral a lo largo de su vida”.
Flanqueada por encabezó Beatriz Hernández Rojas, presidenta del organismo empresarial quienes fijaron un posicionamiento con motivo del 8 de marzo en el que se conmemora el Día Internacional de la Mujer, De la Cruz Reséndiz enfatizó que el 75.2 por ciento de las mujeres ha sufrido violencia, psicológica, sexual, económica o patrimonial en la entidad.
Por ello, Hernández Rojas, consideró que este momento de reflexionar sobre los retos que aún tenemos que enfrentar, pues pese a que se ha avanzado, no ha sido con la rapidez que se necesita, ni con la efectividad que necesita la época y el mundo actual.
“En la más reciente Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, en enero de 2024 revela que el 24.7 millones de mujeres cuentan con un trabajo remunerado, sin embargo, 13 millones trabajan en la informalidad, lo que representa que más de la mitad de las trabajadoras mexicanas no cuentan con certidumbre jurídica, carecen de acceso a servicios de salud básicos y no cuentan con prestaciones laborales”.
Por otro lado, mencionó, la última Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares (ENIGH) del INEGI nos señala que, en promedio, las mujeres ganan 6 mil 360 pesos al mes, mientras que los hombres perciben 9 mil 762 pesos.
“Esto se traduce en una brecha de ingresos del 35 por ciento o lo que es lo mismo, por cada 100 pesos que gana un hombre, una mujer recibe 65 pesos”.
Destacó que si bien, entre 2005 y 2023 la participación de las mujeres en la economía del país creció cinco puntos porcentuales al pasar de 41 por ciento a 46 por ciento durante este lapso.
“A este ritmo, tomaría 119 años que las mujeres alcancen la tasa de participación económica de los hombres y por ello tenemos que impulsar la incorporación de más mujeres en la economía formal”.
Propuestas de Acción
Ante este panorama, dijo, la Coparmex planteará al gobierno del estado y a las y los candidatos a los diferentes cargos de elección popular cinco propuestas.
La primera propuesta, refirió, es la reducción de violencia de género pues es necesario y urgente implementar estrategias de alerta temprana y prevención de la violencia en contra de las mujeres.
“Estas deben incluir capacitación del personal, aseguramiento de recursos, coordinación interinstitucional, rutas de actuación, acceso a servicios de apoyo y monitoreo constante. El compromiso de los gobiernos debe ser el de crear comunidades seguras”.
Otra propuesta, detalló, son los incentivos fiscales para empresas que cumplan la Norma en materia de Teletrabajo; La Secretaría del Trabajo y Previsión Social promovió la NOM-037 la cual se centra en brindar condiciones de seguridad y salud en el trabajo para el home-office o de forma remota.
“Esta norma es un paso adelante para garantizar que hombres y mujeres tengan igualdad de oportunidades y un trato justo en el entorno laboral, pero se debe enfocar especialmente en ayudar a que las mujeres puedan desarrollarse sin descuidar a sus hijos; por eso se requieren incentivos fiscales para que cada vez sean más las empresas que cumplan con ella”.
La tercera propuesta, planteó, es el regreso de estancias infantiles pues solo un 3 por ciento de los niños menores de seis años goza de guarderías o estancias infantiles públicas y un ínfimo 1 por ciento tiene acceso a instalaciones privadas de cuidado infantil.
“Las estancias infantiles no solo son espacios para que los niños sean cuidados mientras sus madres trabajan, pues también ofrecen estimulación, socialización temprana, detección de necesidades especiales y equidad educativa. Sin duda, estos espacios contribuyen a reducir el estrés familiar y desempeñan un papel crucial en la prevención de desigualdades sociales”.
Mencionó que también se plantean las Escuelas de Tiempo Completo pues son esenciales para el desarrollo educativo y social de los estudiantes.
“Ofrecen un entorno estructurado y enriquecido que facilita un aprendizaje más profundo. Además, brindan oportunidades para actividades extracurriculares, apoyo académico adicional y ayudan a las madres y padres trabajadores al proporcionar un entorno seguro y educativo en la mayor parte del día”.
Finalmente, y no por ello la menos importante, mencionó, son mesas de trabajo entre el gobierno y empresas para mejorar sus condiciones laborales.
“Es urgente establecer una agenda de trabajo común para poner alto a los diferentes tipos de violencia que sufre la mujer. Proponemos una Mesa donde se analicen propuestas focalizadas por tipos de violencia con la finalidad de fomentar sociedades de paz, a través de la implementación de programas educativos que promuevan valores como el respeto, la empatía y la igualdad. Son necesarios protocolos, pero también acciones gubernamentales para combatir la impunidad y generar incentivos positivos”.
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