Miguel Gallardo
Conforme pasan los días y los efectos de la pandemia, algunas personas se han visto en la necesidad de innovar para seguir o en dado caso mejorar su economía. Tal es el caso de “Cris”, quien junto con su hermano y otros dos empleados trabajan en su Barber Shop móvil.
“Tenemos otro negocio en un local, pero en este nos va bien, aunque a veces llegan unas tres personas en todo el día, pero de repente atendemos a más de 20”, comentó el hombre, quien dijo que la idea la tomó de una persona aquí en Querétaro y que tenía un negocio similar en Estados Unidos.
Dijo que inician sus actividades a las 11 de la mañana y terminan a las nueve de la noche, mientras que los domingos concluyen a las siete.
Por ahora llevan dos meses de haberse instalado sobre el Bulevar Bernardo Quintana esquina con Bulevar Peñaflor, lugar que les ha permito acreditarse para recibir a la clientela.
“El patrón compró el camión y tardamos un año en desarmarlo por dentro y acondicionarlo para el negocio. Todavía faltan algunos detalles, porque queremos poner un frigobar para invitarle algo de tomar a los clientes”, expresó Cris.
Mientras que Bryan, nacido en Panamá, mencionó que hacía el mismo trabajo en Estados Unidos, pero que ahora se ha adaptado a la dinámica con la que trabaja en México.
“Soy deportado de Estados Unidos, pero en México me permitieron quedarme y poder trabajar sin problemas”, señaló.
El exterior del Barber Shop es negro y frente a él colocan un banderín para anunciar de qué se trata. Por dentro lo pintaron del mismo color y el espacio muestra la amplitud necesaria para trabajar en este innovador negocio de corte de cabello y barba.
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