Katia Lemus Barajas
María Diana Lorena Rubio Navarro llegó a la ciencia por accidente y no porque supiera que quería ser científica; actualmente fue galardonada con el Global Teacher Prize 2021, reconocimiento que entregó la Fundación Varkey y la Unesco para reconocer la trayectoria y aporte de los docentes.
“Yo a la ciencia llegué por accidente no porque yo supiera que quería ser científica, entonces, yo lo que intento mucho es generar la vocación científica y que los estudiantes conozcan de manera general cuáles son las opciones y que vean a las ciencia como un proyecto de vida”.
La licenciada en Educación Física por la Escuela Normal del Estado de Querétaro aseguró que es importante considerar que la metodología de indagación y desarrollo de habilidades científicas básicas son las que le permiten al estudiante plantear preguntas de alto impacto que resuelva problemas de su contexto, que registren datos, que analicen, que generen hipótesis, que comprueben y demuestren lo que experimentan.
“Es muy importante que nosotros desarrollemos habilidades científicas básicas porque de manera paralela podemos desarrollar las competencias del Siglo XXI, mientras desarrollamos un proyecto de investigación estás desarrollando también las competencias del Siglo XXI, pero además estas incidiendo en que los conceptos que ellos van aprendiendo de química, física y matemáticas les dan mayor sentido cuando realmente los utilizan para resolver un problema cotidiano”.
Afirmó que en este proceso también se desarrolla la vocación por la ciencia porque cuando no te acercas a la ciencia y no la conoces te enfrentas a muchas dificultades porque no es un camino fácil, pero si es un camino al que puede acceder cualquiera que muestre interés.
María, también acreedora del Premio Docentes Extraordinarios: National Teacher Prize México, reconoció que hay estudios que demuestran que en la etapa de secundaria los chicos enfrentan de manera muy ruda la física, química y matemáticas y por eso escogen carreras que no tenga nada que ver con ellas por lo que es necesario que los docentes acerquen estas materias a los alumnos.
“Tenemos que hacer un trabajo más profundo respecto a cómo acercamos estas asignaturas a los estudiantes y cómo las acercamos desde el punto de vista que ellos entiendan que matemáticas sirve para resolver situaciones de la vida cotidiana; es complejo porque que los chicos deben dejar de pensar a en la célula como ese círculo que tiene otro circulitos adentro, que es dinámica, que es la que se afecta y que forma parte de órganos, tejidos y sistemas y que hay muchos tipos, entonces tienes que desarrollar cierto grado de curiosidad para que se maravillen con eso”.
Consideró que vale la pena hacer un trabajo de diseño de experiencia significativa para que los jóvenes se interesen más por las ciencias porque están en la vida diaria.
Rubio Navarro, también doctora en Ciencias Biomédicas, detalló que el reto de la educación a nivel global es que cada niña, niño, joven y adolescente tenga acceso a la educación.
“Otro reto sería el acceso a los requerimientos básicos necesarios creo que la pandemia ha hecho visible el hecho de que hay niños que aunque tenga la disponibilidad no existen las condiciones o la infraestructura, me refiero al acceso a internet y a un dispositivo”.
Enfatizó que como docentes deben dar un paso en otra dirección, es decir, que los lleve al mismo objetivo de formar íntegramente estudiantes.
“Debemos dar un paso que nos permita explorar nuevas rutas en que las que de alguna manera incidamos desde otra perspectiva en los estudiantes que le sean significativos los aprendizajes, que diseñemos experiencias significativas que les permita aprender durante toda su vida porque los chicos se van a enfrentar a retos en el futuro que van a requerir competencias y que van a ir modificando poco a poco”.
Los jóvenes, aseveró, deben capacitarse de manera contante porque los empleos del futuro se transforman constantemente, al igual que la tecnología, entonces la educación también tiene que evolucionar.
“Los estudiantes van a tener que pasar más tiempo capacitándose y aprendiendo de manera constante, entonces como docentes hay que ayudarlos a desarrollar esa capacidad de aprender, de transitar de una a otra y por supuesto aprender en función de comunidad y no en lo individual, sino para el bien común para tener sociedades más justas, equitativas y sostenibles”.
La madre de Regina y Sofía de 14 y 11 años, respectivamente, dijo que otro de los retos que tienen los docentes es aportar y agregar valores humanos.
“Me parece que cuando le damos voz a los estudiantes a las y los estudiantes y cuando centramos nuestros esfuerzos en que ellos tengan oportunidades diferentes ven la educación como un trayecto y no como una clase, sino que podamos aportar y agregar valores humanos que les ayuden a hacer frente a los retos del Siglo XXI”.
Llamó a sus compañeros docentes a acompañar a los estudiantes a que identifiquen qué les gusta, a que desarrollen talentos, a impulsarlos para que se vuelvan especialistas en eso que les gusta y motivarlos a realizar lo que les gusta.
“Llamo a los docentes a acompañar, de una manera más humana y social, a los estudiantes; además, el tema de la educación es un tema social y que no solamente depende del docente, en eso estamos juntos los padres, la sociedad en general, las instituciones y las empresas. Integrando los esfuerzos de toda la sociedad podamos beneficiar los trayectos de los estudiantes porque es necesario que el docente escuche y de voz a los estudiantes”.
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