El presidente Andrés Manuel López Obrador declaró desde Huatulco, Oaxaca, que el extinto Fondo de Desastres Naturales (Fonden), era un “programa podrido”, que solo servía para que funcionarios públicos sacarán provecho cuando ocurría alguna desgracia.
Acompañado por el gobernador Alejandro Murat, el titular del Ejecutivo federal señaló que ahora, bajo su gobierno, ante una emergencia lo primero es salvar vidas. Posteriormente se lleva a cabo un censo para registrar las afectaciones de cada casa y apoyar a toda la población, sin ningún límite en el presupuesto.
Además, López Obrador señaló que el método de ayuda que ha implementado durante su gobierno ha dado “buenos resultados” a diferencia de las administraciones pasadas a las que acusó de solo ayudar a «los de arriba» mientras que no llegaba nada a la gente.
“Este método de atención a damnificados, ya lo hemos probado, y nos ha dado buenos resultados. Lo hemos probado en Chiapas, Tabasco, Veracruz, en Nayarit, en donde lamentablemente han habido también afectaciones. Antes se entregaban los recursos arriba y no le llegaba nada a la gente, o se hacía una declaratoria de emergencia y se decía “hay tantos afectados”, y había lo que llamaban el Fonden, que era un programa podrido, porque cada vez que habían desgracias, sacaban provecho los altos funcionarios públicos» aseguró el presidente.
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