Tal y como lo había adelantado, el presidente de Estados Unidos Donald Trump firmó una orden ejecutiva para imponer aranceles de 25 por ciento a las importaciones de acero y aluminio que arriban al país, provenientes de todas las naciones, los cuales entrarán en vigor a partir del 4 de marzo.
El mandatario hizo uso de la facultad que le otorga la sección 232 de la Ley de Expansión Comercial para imponer este tipo de impuestos alegando motivos de seguridad interna. Esta orden no es nueva, pues en 2018, también lo había hecho.
“Básicamente, estamos imponiendo un arancel de 25 por ciento, sin excepción, a todo el aluminio y todo el acero, y eso significará que muchas empresas abrirán en Estados Unidos”, afirmó Donald Trump.
Al firmar este decreto, se incluye a los socios comerciales más cercanos de Estados Unidos: México y Canadá, y a todos los demás países que exportan este tipo de materiales a la nación norteamericana.
No obstante, estos impuestos tendrían un impacto directo en los precios en los que se venden productos a consumidores estadounidenses, pues se aplicaría a artículos como automóviles, marcos de ventanas y losas.
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