Violentos enfrentamientos entre la policía y un grupo de manifestantes se registraron en Atenas al margen de las manifestaciones de protesta por la catástrofe ferroviaria, que hace más de dos semanas causó 57 muertos.
Los manifestantes lanzaron bombas molotov, a lo que la policía respondió con gases lacrimógenos y granadas de percusión cerca del Parlamento, en el centro de la capital.
Al menos 40 mil griegos están en las calles mientras que el país se encuentra en gran parte paralizado por una huelga general. Los manifestantes se reunieron ante la sede de la compañía de ferrocarriles Hellenic Train, como ya habían hecho tres días después de la colisión entre un tren de pasajeros y un convoy de mercancías la noche del 28 de febrero.
Después de varias manifestaciones de alcance limitado en los días que siguieron al accidente ferroviario, las protestas continúan y piden la renuncia del primer ministro Kyriakos Mitsotakis.
Hasta el momento, Grecia sigue paralizada. Todos los barcos que conectan el continente con las islas permanecen atracados, al igual que la mayoría de los aviones estacionados en las pistas.
Según el ministro de Transportes, el tráfico ferroviario no debería reanudarse, y solo gradualmente, hasta el 22 de marzo.
Muchas escuelas también están cerradas, mientras que los estudiantes, en primera línea en esta ola de protesta inédita desde los años de la crisis financiera, continúan siendo numerosos en las manifestaciones.
Fuente: La Jornada
Be the first to comment