La investigación preliminar de la aerolínea Azerbaijan Airlines sobre el avión que se estrelló en Kazajistán reveló que sufrió fallos por “interferencias externas, físicas y técnicas”, por lo cual las especulaciones sobre si fue alcanzado por un misil de defensa ruso continúan tomando fuerza.
De acuerdo con las primeras indagaciones de la aerolínea, el accidente fue causado externamente, es decir, que la aeronave no tuvo ninguna falla mecánica, por lo que fueron motivos fuera de su alcance los que provocaron su desplome el pasado 25 de diciembre.
“Los resultados preliminares del investigación sobre el accidente del avión Embraer 190 que operaba el vuelo Bakú-Grozni J2-8243 de Azerbaiyán Airlines apuntan a interferencias externas, físicas y técnicas”, anunció la aerolínea, que también confirmó que suspenderá sus vuelos a varias ciudades rusas.
En el siniestro, fallecieron 38 personas, mientras que 29 sobrevivieron y fueron canalizadas a diversos centros de salud para su atención. En redes sociales circulan videos del momento en el que el avión impacta con el suelo tras perder altura.
Ante los rumores de que Rusia tuvo que ver con el accidente, el Kremlin señaló que no se pronunciará hasta que finalice la investigación, sin embargo, el director de la Aviación Civil de ese país afirmó que el avión intentó aterrizar en Grozni, la capital de Chechenia, mientras se desarrollaba un ataque de drones ucranianos.
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