La UEFA ha encargado un informe sobre los incidentes del sábado en las afueras del Stade de France en París que retrasaron el inicio de la final de la Liga de Campeones entre el Liverpool y el Real Madrid, donde aglomeraciones de aficionados del Liverpool fueron rociados por la policía con gases lacrimógenos.
Miles de aficionados entraron en tromba al campo de Saint Dennis para intentar burlar la seguridad y aprovecharse de las endebles defensas francesas, que no pudieron parar a la marabunta que atacó las puertas.
Robos a aficionados, agresiones y una alarmante falta de seguridad y control causaron el caos en la final de la Liga de Campeones, algo inédito en el fútbol moderno.
Mientras la UEFA atribuyó los incidentes al retraso de algunos espectadores, las autoridades francesas denunciaron un supuesto fraude «a escala industrial» con las entradas de la final, por lo que se anunció una investigación para determinar qué ocurrió y depurar responsabilidades.
Be the first to comment