Las plataformas petroleras de Pemex en el Golfo de México han estado siendo víctimas de diversos robos. A mediados de este mes, un grupo de diez hombres armados llevó a cabo otro atraco en la zona marítima Sonda de Campeche, donde seis trabajadores fueron amagados con armas largas y cortas apuntadas a su cabeza y fueron robados equipos, herramientas, materiales y otros artículos de una plataforma petrolera que operaba la firma Eyva.
En lo que va del año se han reportado al menos cinco asaltos a instalaciones en la Sonda de Campeche, sin embargo, la cifra es mayor, ya que habría cerca de 20 eventos de piratería en la zona, los cuales no han sido denunciados, de acuerdo con información de los trabajadores que laboran en la zona.
Luis Miguel Labardini, socio del despacho especializado en el sector energético Marcos y Asociados, advierte de que lo sucedido es un reflejo de lo que acontece en el país en cuanto a la seguridad. “Los equipos que se roban en las plataformas aparecen en Ciudad del Carmen y los subcontratistas o los contratistas, sin darse cuenta, compran equipo robado, ese círculo vicioso es lo que hay que romper. En la medida en la que no haya mercado para equipo robado no hay manera de que esto sea negocio”, aseguró.
Líderes sindicales ya han acusado a Pemex, y consideran que de llevarse a cabo una investigación que involucre a la tripulación, podrían sembrar culpables en lugar de reconocer la incapacidad de la Secretaría de Marina (SEMAR) de combatir a la delincuencia en la zona.
“Afortunadamente, no ha habido violencia extrema que lleve a la muerte de los miembros de las tripulaciones y aquí son Pemex y las empresas contratistas, por igual y hay que considerar la posibilidad de que haya gente dentro de las organizaciones que den la información de dónde están los equipos”, agrega Labardini.
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