Desde hace 3 meses, la señora Rosa Rojas, oriunda de La Cañada, El Marqués, quien presto sus servicios por 28 años como Policía Tercero de la Guardia Municipal en Querétaro, se encuentra protestando afuera de las instalaciones del Centro Cívico, con la intención de que le aumenten el salario en su pensión.
Rosa, se jubiló desde el año 2013 y desde ese entonces comenta que le bloquearon el aumento en el 2018 con la llegada de la administración en donde el actual presidente del estado Luis Bernardo Nava Guerrero tomo el poder. Además, asegura que el edil y sus administradores, inventaron una cláusula en el año 2019 que a ella no le aplica pues se jubiló 6 años antes.
La señora Rosa se encuentra afuera de las instalaciones de este recinto público en una casa de campaña que pone en riesgo su integridad física pues tiene 52 años de edad; además de que su padre don Alejo Rojas de 82 años se encuentra con ella desde hace 92 días, expuestos a las lluvias, fríos y el fuerte viento que en ocasiones ha derribado su casa de campaña pues está hecha de lonas.
“Ya tenemos 3 meses de plantón aquí, hasta el momento no nos han dado acceso a platicar con alguna autoridad por la dichosa cláusula que inventaron en el 2019, esto fue un acuerdo político entre el gobernador y el presidente municipal para escatimarle y ser omisos ante las prestaciones que tiene ganada mi hija”, señalo Don Alejo.
De igual manera, mencionan que tuvieron que sacar un préstamo de 10 mil pesos para poner un puesto de dulces, galletas y cigarros dentro de su casa de campaña para así poder comer y solventar sus gastos por el tiempo que permanezcan ahí.
Destacan que han sido víctimas de violencia y robo por parte de vándalos que se acercan a su guarida a romperles la lona y robarles su mercancía, quienes hasta el momento les han robado la cantidad de 4 mil pesos. Así mismo, han recibido amenazas de muerte por parte de estas personas y aseguran que son mandados por el municipio para tratar de ahuyentarlos.
“ Aquí estamos en peligro de integridad física yo ya tengo 82 años y mi hija también ya casi es de la tercera edad, estamos bajo la influencia del tiempo primero la lluvia porque aquí se inundaba, el viento ha tumbado casi la casita, el frio y los vándalos porque nos han mandado en la noche a locos a que nos amenacen que si no nos vamos de aquí nos van a matar, pero vienen por parte del municipio, los mismos policías nos dijeron el otro día que a ellos los manda el municipio para espantar a los que vienen a molestar”
Indican, que hasta el momento no han sido escuchados por alguna autoridad, pues el alcalde capitalino no les ha brindado ningún apoyo, al contrario, les cierran las puertas del recinto público y no les permiten el acceso pues les aseguran que no les pueden dar alguna solución si no hasta que un juez lo ordene.
“He tratado de pasar con el presidente a dejar el oficio, porque quiere una audiencia, me cerraron las puertas a todos dejaron pasar menos a mí. Le dieron ordenes al guardia de seguridad de que no me dejara entrar”
Por último, afirman que no se irán del lugar hasta que le den alguna solución a su problema, aún sin abogados que quieran darle seguimiento a su caso.
“Quieren cansarnos, pero cuando llegamos aquí juramos que “Oh ganamos esta lucha o morimos en el intento” porque a los abogados que llevaban nuestra demanda los compraron y dijeron que no se podía hacer nada.
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