En un esfuerzo por promover la capacitación y formación de funcionarios públicos para realizar sus funciones y responsabilidades con una mayor transparencia, se llevó a cabo la conferencia «Visión y Perspectivas de la Lucha contra la Corrupción», la cual se realizó en la Universidad Anáhuac.
Esto, como parte de la firma del Memorándum de Entendimiento entre la Organización de Estados Americanos (OEA), la Entidad Superior de Fiscalización (ESFE) y el Poder Legislativo del Estado, el pasado mes de agosto,
En su mensaje de bienvenida, Selene Salazar Pérez, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de Querétaro reconoció que a diferencia de otros estados del país, Querétaro es un referente en atención a las buenas prácticas de gobierno, y es que el respeto a la ley y su aplicación es punto de partida para prevenir y erradicar la corrupción.
“Desde el Congreso local se construyen el andamiaje jurídico para continuar con un estado de vanguardia, por lo que se necesita de las ideas de todos, ya que para emprender la lucha contra la corrupción se necesita la valentía de hombres y mujeres leales a su país y con la capacidad de discernir lo que es justo y apegado a derecho”.
Ana Paola López Birlain, presidenta de la Comisión de Educación y Cultura, consideró que es necesario que los estudiantes, sobre todo los universitarios participen y se involucren más en la política para tener mejores gobiernos y gobernantes, además de que conozcan quienes les representan y cuáles son sus derechos. Dijo que la educación es la clave, pues a través de esta se pueden cambiar muchas cosas.
Antonio Zapata, presidente de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil, consideró que la función de la seguridad pública tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los habitantes, para lo cual se deben cumplir una serie de normas que inciden en un sistema anticorrupción, pero esto se logrará siempre y solamente cuando se combata desde cada uno de los espacios que ocupa cada ciudadano.
En su ponencia, Moisés Bernamor, jefe de Sección de Apoyo a Instituciones Representativas de la OEA consideró que en las sociedades democráticas han caído en su nivel de confianza, lo que significa un desafío para generar credibilidad en las instituciones democráticas, ya que este sistema está en riesgo.
Destacó que en el índice global de percepción de la corrupción se evalúan 180 países, de los cuáles México se ubica en el lugar 124. De este total de países, el 68 por ciento está por debajo de cinco puntos en una calificación de 0 a 10, México obtuvo el 3.4, por lo que dijo que hay mucho trabajo por hacer.
Destacó cuatro retos y desafíos para que las dependencias logren una mayor transparencia: el primero tiene que ver con promover los derechos que permiten acceder a una rigurosa rendición de cuentas; el segundo con la supervisión del poder, es decir, que la ciudadanía exija una rendición de cuentas de una manera directa y que se que puedan obtener resultados de manera inmediata.
El tercer elemento, dijo, tiene que ver con el combate de la corrupción, recordó que Latinoamérica es un ejemplo de cómo el crimen organizado es uno de los motores más importantes de la corrupción en el país y mucho tiene qué ver la incapacidad de construir marcos normativos para combatir delitos financieros, lavado de dinero o tráfico de personas; el último tiene que ver con el derecho a la información el gasto público, que no sea una caja negra difícil de acceder sino que debe ser transparente, de una manera directa y con pleno acceso a la información del ciudadanos.
Guillermo Moncayo, del Departamento de Seguridad Pública de la OEA, informó que la tasa de homicidios en el Continente Americano es de 17.2 por cada 100 mil habitantes, comparado a la tasa global que es 6.2, homicidios, significa lo doble a nivel global. Consideró que son las organizaciones de crimen organizado las que permean en las instituciones de seguridad, por lo que es necesario que todas las dependencias del ramo se conecten y trabajen en conjunto, pues la cooperación entre estas hará que disminuyan la intromisión del crimen organizado.
Consideró muy importante un mayor grado académico entre el personal de seguridad, así como la constante capacitación.
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