El acusado de perpetrar el tiroteo que mató al menos a 19 niños y dos maestras en una escuela primaria en Uvalde, en Texas, Estados Unidos, es Salvador Ramos, un joven de 18 años, alumno de la Escuela Secundaria Uvalde.
Las redes sociales de Ramos estaban llenas de fotos de armas. También había subido fotos de sus rifles a su cuenta de Instagram @salv8dor_, que fue cerrada minutos después de que se diera a conocer su identidad.
El asesino adquirió dos rifles en los últimos días, nada más cumplir los 18 años, y había compartido fotos y mensajes de texto apenas unas horas antes de llevar a cabo el ataque con una mujer en redes sociales.
Dejó su vehículo fuera de la escuela, entró a la carrera al centro como muestra un vídeo grabado por un vecino y «disparó y mató de manera horrible e incomprensiblemente» a niños y profesores. Según han informado a los medios, todos los fallecidos en la masacre estaban dentro de un aula en la que el asesino se atrincheró.
De igual forma, antes de llevar a cabo el tiroteo, disparó primero a su abuela en su casa. Sin embargo, las autoridades confirman que no consiguió acabar con su vida.
El tiroteo es el más letal en Estados Unidos en lo que va de 2022, y el segundo en un centro escolar más mortífero de la última década.
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