Los equipos de rescate en Turquía y Siria continúan las labores contrarreloj para salvar a los sobrevivientes atrapados entre los escombros de los grandes edificios derrumbados por el terremoto que deja ya más de 15 mil muertos.
En Turquía se declararon siete días de luto y un estado de emergencia de tres meses en las provincias más castigadas, mientras que en Siria, país castigado por más de una década de guerra civil, el saldo llega a 2 mil 992 muertos, según el balance del gobierno y de los equipos de protección civil.
Ante la situación, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, reconoció las “deficiencias” de su gobierno en la respuesta de atención hacia la población tras el terremoto y argumentó que “es imposible estar preparado para una catástrofe así”.
Los habitantes de la zona han criticado la reacción de las autoridades, ya que aseguran que los rescatistas llegaron con demoras. En respuesta, el mandatario comentó que “gente deshonrosa” difundía “mentiras y calumnias” sobre las tareas emprendidas por su gobierno.
Ante las críticas, un grupo que vigila en internet denunció que estaba restringido el acceso a la red social Twitter, a pesar de que lo usaban los sobrevivientes para alertar de su paradero y ser rescatados por los equipos de emergencia.
Fuente: La Jornada
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