El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero (Semaren), Ángel Almazán Juárez, informó que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) encontró que el zoológico Zoochilpan de Chilpancingo, Guerrero, sacrificó cuatro cabras pigmeas que sirvieron como alimento para el festejo de fin de año.
Además, cuatro watusis fueron vendidos por 65 mil pesos sin que ese dinero se viera reflejado en los ingresos del zoológico; una cebra fue intercambiada por ciervos rojos sin autorización; borregos de Berbería fueron vendidos; una guacamaya, un jaguarundi y 10 serpientes están desaparecidas, y además un venado murió por negligencia.
Almazán Juárez explicó que en el caso de la cebra, ubicaron un acta de entrega-recepción, con fecha del 3 de enero, y fue entregada a René David Trujillo Sotelo en San Juan del Río, Querétaro, sin autorización. Este animal fue intercambiado por ciervos rojos. Se desconoce dónde está y cuáles son sus condiciones.
Con respecto a las cuatro cabras pigmeas, se determinó que “fueron sacrificadas y cocinadas en las instalaciones del mismo zoológico y fueron utilizadas como comida en el festejo de fin de año”.
En relación con los borregos de Berbería, la investigación indica que el exdirector del zoológico vendió nueve ejemplares por una cantidad de 54 mil pesos. Para la venta, Nava Noriega falsificó información para que la Semarnat le autorizara el aprovechamiento extractivo para intercambiarlos por insumos.
En relación con la muerte del venado, la investigación determinó que falleció porque se desangró ante la falta de atención, además que fue suturado sin anestesia.
Entre otras irregularidades que hallaron están que el exdirector realizaba las muestras de laboratorio en un negocio familiar, donde elevaban los precios, y que hizo compras “fantasma” de medicamentos.
Fuente: El Universal
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