Katia Lemus Barajas
Con una celebración religiosa, la primera generación de la Maestría en Sexualidad Humana de la Universidad Vasco de Quiroga (UVAQ) concluyó sus estudios académicos.
Después de cumplir exitosamente con su formación académica los nueve alumnos que finalizaron sus estudios decidieron dar gracias a Dios por haberles permitido llegar al final de esta etapa académica por lo que monseñor Martín Lara Becerril, vicario de la Diócesis de Querétaro se encargó de oficiar la celebración eucarística.
En un emotivo mensaje Lara Becerril se dirigió a los graduados a quienes exhortó a poner en práctica lo aprendido y sobre todo a seguirse preparando para ser agentes de cambio en beneficio de la sociedad.
Al término de la misa, los graduados se trasladaron al auditorio universitario en donde se realizó el acto cívico y la entrega de constancias, evento que presidió Raúl Martínez Rubio, rector general de la UAQ, quien felicitó a los alumnos por concluir satisfactoriamente una etapa más en su vida.
Flanqueado por Sergio Lozano Vázquez, integrante de Junta Directiva de la UVAQ; el vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril y el coordinador de la Unidad Académica, Roberto García Ortega, Martínez Rubio recordó que una maestría tiene como finalidad buscar la manera de hacer más, aprender más y entender más.
“La Maestría en Sexualidad Humana comprende la complejidad de la naturaleza humana en cuerpo y espíritu; los egresados de este posgrado estudiaron el comportamiento biológico, psicológico y sociocultural, para capacitar en espacios de educación, terapia y promoción de la salud sexual”.
En su oportunidad, García Ortega reflexionó sobre la importancia de tres palabras que buscan imprimir el carácter de esta primera generación.
“Gratitud, es decir, dar la gracias a Dios y a su tu familia por este gran regalo para ti y para la Iglesia en donde no se debe olvidar que los grandes objetivos y metas siempre los logramos en comunidad”.
El servicio, pues destacó que durante los dos años de formación el estilo es servir a los demás en donde la educación es un servicio por excelencia, es decir, que esto que ahora saben lo pongan al servicio, especialmente hacia los más fragmentados y a los más pobres, pues es ver en el otro o en la otra a Jesús y así servirlo de manera concreta.
“Finalmente el tercer concepto es amor a la verdad, que te sigas preparándote para buscar diálogo y respuestas ante los grandes desafíos que pone el tema de la Sexualidad y desde la integralidad de la persona humana con visión trascendente e interdisciplinaria”.
El alumno Carlos Rodarte, egresado de la maestría, habló en nombre de sus compañeros de clase, a quienes agradeció la oportunidad de hacer uso de la voz para expresar su gratitud no solo a ellos por su camaradería, sino también a sus maestros, al coordinador y al personal administrativo pues consideró que la educación salvará al mundo.
Después de entregar las constancias la alumna Celia Núñez recibió un reconocimiento por obtener el mejor promedio de su generación al obtener 9.9.
Be the first to comment