Katia Lemus Barajas
Leonel Equihua Santos, es un joven con insuficiencia renal y desde hace tres años está en lista de espera para recibir un riñón “nuevo”, pero en lo que eso sucede aprovecha el tiempo y el ánimo para trabajar en lo que puede y actualmente vende piñatas sobre la Avenida Universidades, a la altura del Hospital Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El joven de 35 años dice que cada vez que puede y tiene fuerza vende diversos productos para poder comprar sus medicamentos pues las hemodiálisis se las subsidia una fundación a la que le está muy agradecido.
“Desde que me diagnosticaron insuficiencia renal procuré buscar apoyos de las diferentes instituciones de salud porque no tengo un empleo formal debido a mi enfermedad y por lo tanto tampoco seguro social, y cuando encontré esta fundación ellos me han apoya con las hemodiálisis porque por cada una me cobran mil 300 pesos y ocupo dos a la semana”.
Reconoce que es un comerciante informal porque solo sale a vender cuando hay festividades, por ejemplo en estas fiestas decembrinas vende series de luces y piñatas y el día de reyes vende aguinaldos de dulces.
“Para el 14 de febrero, y otras festividades como 16 de septiembre, 2 y 20 de noviembre también vendo diversos artículos de temporada, no es mucho lo que gano, pero me sirve para solventar los gastos de medicamento y algo de materia de curación”.
Confió en que primeramente Dios para el próximo año le den la noticia de que ya le toca su turno para ser operado y pueda rehacer su vida.
“Me gustaría terminar de estudiar y trabajar en una oficina donde tenga un sueldo y sobre todo prestaciones de ley; estoy seguro que primeramente Dios para el año que entra recibiré el riñón que necesito para mi trasplante”.
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