Detectan autoridades de la frontera de California un incremento en el número de ciudadanos rusos y ucranianos que cruzan desde México, en busca de asilo político, por lo que han reforzado el control del paso de vehículos particulares.
La oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) clausuró más de la mitad de los carriles de ingreso desde la frontera con Tijuana para que los conductores muestren sus identificaciones.
Detalló que estos inmigrantes viajan en vehículos mexicanos usados que adquieren a bajo costo, para cruzar la franja fronteriza entre los dos países, y una vez dentro de Estados Unidos, se entregan a oficiales federales a quienes piden asilo.
Este ha sido el método que ha utilizado la mayoría de, 6400 solicitantes de asilo rusos y unos 1000 ucranianos entre el primero de octubre y finales de enero, según indicó CBP.
Siendo esta las estadísticas disponibles más recientes, pero un oficial anónimo, dijo que los inmigrantes de ambas nacionalidades han llegado con más insistencia desde que Rusia comenzó a invadir Ucrania el pasado 24 de febrero.
De acuerdo con ese oficial, los rusos y ucranianos vuelan de Europa a Ciudad de México o a destinos turísticos mexicanos, luego viajan a la ciudad de Tijuana, compran autos usados baratos y cruzan la frontera para pedir asilo.
Señaló que los solicitantes de asilo de Rusia y Ucrania, a diferencia de los de la mayoría de los países latinoamericanos, una vez que piden asilo pueden continuar sus procesos de asilo al lado de sus familiares y sus allegados.
Sin embargo, para el resto de los migrantes, la administración del presidente Joe Biden ha mantenido el mecanismo Título 42, una disposición sanitaria, con la que los agentes fronterizos quedan autorizados para enviar de inmediato a suelo mexicano a los solicitantes de asilo, como medida para prevenir contagios de la covid-19.
Fuente: The San Diego Union Tribune
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